La red social Twitter puso este viernes en abierto la mayor parte del código fuente que sirve, entre otras cosas, para fijar los algoritmos, según anunció su equipo de ingenieros, que lo describió como el principio de “una nueva era de transparencia”.
De inmediato, Elon Musk, el magnate propietario de la red, lo retuiteó y explicó que con este código abierto “terceras partes podrán determinar con una exactitud razonable, lo que probablemente va a mostrarse a los usuarios”.
Admitió que esto sacará a la superficie “muchas cuestiones embarazosas”, pero prometió que se resolverán con prontitud.
En el blog de la compañía se explica que se ha excluido código que pudiera comprometer la seguridad y la privacidad de los usuarios o “la habilidad de proteger nuestra plataforma”.
Asimismo, tampoco incluye el código que impulsa las recomendaciones publicitarias de la plataforma.
El funcionamiento de los algoritmos representa una de las herramientas más poderosas de Twitter y de todas las redes sociales, pues determinan cuál será el “feed” o flujo de información que aparecen en la cuenta de cada usuario.
El algoritmo, alterado tras la llegada de Musk
Desde que Musk se hizo con la propiedad única de Twitter a fines del pasado octubre, fue claramente perceptible cómo el algoritmo había variado para cosas tan evidentes como la aparición más frecuente de publicidad y la preeminencia de los tuits del mismo Musk en el “feed” de cualquier cuenta, fuera o no seguidora de Musk.
Además, muchos usuarios se quejaron de que numerosas cuentas a las que seguían habían caído en el “feed” por debajo de otras muchas que no les interesaban, y se preguntaban por las razones.
Todos estos cambios parecen formar parte de la estrategia de rediseño de Twitter que ha llevado a cabo Musk y que incluyen, por ejemplo, que a partir del próximo 15 de abril, solo las cuentas verificadas en la red social, es decir, las que pagan una cuota, podrán ser recomendadas a otros usuarios.
“Twitter Blue”
Musk publicó el pasado martes un tuit en el que anunciaba estas nuevas medidas que suponen una reorganización del denominado “Twitter Blue”, calificación que se aplica a las cuentas que pagan una cuota para lograr su verificación y con ello obtienen una marca azul.
El empresario de origen sudafricano afirmó que la medida es la única forma realista de abordar el control de los enjambres de ‘bots’ de inteligencia artificial que interfieren en la red a través de contenido generado automáticamente por medio de programas informáticos.
La medida, según el CEO de Twitter, también implica que solo los suscriptores verificados podrán votar en las encuestas que se formulan en la popular red social.